La troika se muestra escéptica
Grecia tendrá que implementar nuevas medidas de austeridad en 2014 para cubrir los fallos contemplados en los objetivos fiscales establecidos.
La troika -CE, BCE y FMI- no ha aceptado la argumentación del gobierno griego de cómo va a lograr el objetivo de superávit primario.
El lado griego considera que las políticas económicas implementadas son suficientes, pero los acreedores internacionales sostienen que el déficit financiero tendrá que cubrirse con nuevas intervenciones, tanto en el frente de los ingresos, como en el frente de los gastos en la salud y los fondos de seguridad.